Este fue uno de los últimos golpes al cuerpo que se consideraron ilegales en el boxeo moderno. Sin embargo, representa un activo formidable en el arsenal de cada boxeador.
Especialmente contra oponentes cuya tendencia es apresurarse y abrazar, este golpe puede llevarse a cabo con gran eficiencia.
En caso de un intento de clinch, mantén un brazo libre y, con la ayuda de un fuerte giro de cadera, golpea fuertemente a tu oponente sobre los riñones con los nudillos. El golpe se puede repetir, si es posible.
Cuando eres atacado desde lejos con golpes directos, desliza el ataque hacia afuera y sujeta el brazo que golpea con la palma de la mano o agarra la extremidad (“overhook” o “underhook”) mientras golpeas con fuerza con un gancho corto en la región del riñón. El daño infligido puede poner fácilmente a tu oponente de rodillas.